Para todos los grupos de clubes de lectura de los que soy monitora, la siguiente novela que leeremos dentro del club de lectura será "Lo Prohibido" de Benito Pérez Galdós. Podréis descargar la novela de los siguientes enlaces:
El tiempo estimado será de unas cuatro-cinco semanas. A partir del 13 de Mayo podremos dar por finalizada la lectura (dependerá de vosotros/as) y así comentarla en el blog. A partir de ese día, si la biblioteca vuelve a abrir sus puertas, podréis entregar el libro anterior del club que tendréis en préstamo, de lo contrario, os volveré a escribir con las nuevas noticias.
¡Esperamos volver a la normalidad lo más pronto posible!
Sinopsis:
Galdós recurre en Lo prohibido a uno de los recursos heredados de Balzac, incluir en la trama personajes de otras novelas suyas. Así aparecen, una vez más: la de Bringas, (ambiciosa hasta el adulterio); la Marquesa de San Salomó ("ultracatólica y adúltera"), salida de las páginas de La familia de León Roch; el avispado y ambicioso Manolito Peña, alumno de Manso, aquí convertido ya en personaje político; o Constantino Miquis, tardío vástago de la familia que sostiene la trama de El doctor Centeno.
Como telón de fondo de sus idas y venidas se ven panorámicas del Barrio de Salamanca, la Puerta del Sol, el Retiro o Atocha. Se callejea, poco, por la calle Montera para visitar el viejo edificio del Ateneo, a punto de ser relevado por el nuevo de la calle del Prado; entran y salen los personajes de la Chocolatería La Colonial, Lhardy, "La Pajarita", "Bolsín", el Café de Santo Tomás o el establecimiento de "Abanicos Sierra" en la Plazuela de Matute. Y como en un escenario metido dentro de otro, Juana Bueno, verá pasar desde su balcón la procesión del Doscientos Aniversario de Calderón de la Barca.
En este "teatro del mundo" instala Galdós, una vez más, a su castiza heroína, la joven Camila, en un pulso de la naturaleza humana contra el cerco social, una lucha desigual y en esencia muy cervantina que luego repetirá en su siguiente novela Fortunata y Jacinta elevándola al límite de lo genial.
En una reflexión que algunos críticos han interpretado como autoanálisis, Galdós pone en boca de Don Rafael, tío del protagonista, este párrafo que José Fernández Montesinos selecciona como síntesis de la novela:
Fuente: Wikipedia"Es el mal madrileño: esta indolencia, esta enervación que nos lleva a ser tolerantes con las infracciones de toda ley, así moral como económica, y a no ocuparnos de nada grave con tal que no nos falte el teatrito o la tertulia para pasar el rato de noche, el carruajito para zarandearnos, la buena ropa para pintarla por ahí, los trapitos de novedad para que a nuestras mujeres y a nuestras hijas las llamen elegantes y distinguidas, y aquí paro de contar porque no acabaría."